lunes, 13 de junio de 2011

Kosta Trail: Helado de queso de idiazabal con membrillo y nueces.

Amaneció una mañana fresca y nublada a pesar de que las previsiones eran de calor, de bastante calor. Mas adelante sí hizo calor pero no demasiado, lo que de cara a la carrera vino bien.

En la salida, mucha gente conocida: Iñaki, Ivan, Piter-Man, Angel, Alberto, Jay… Bueno, de hecho, con Jay había quedado y fui buena parte de la carrera con él. Mucho ambiente en la salida ya que este año estábamos los de la carrera y las martxas juntos. Los de la martxas salieron a las 9:00 y nosotros 30’ después.

La primera parte de la carrera, que este año era lo nuevo, era un terreno muy del estilo de los alrededores de Lezama. Caminos de barro, con piedras, hierba, zarzas y mucha vegetación alrededor y bastantes palas no muy largas pero duras. Algunas partes bonitas, otras no tanto porque salían a zonas urbanizadas cercanas. Por aquí fui más o menos tranquilo, a buen ritmo pero sin forzar.

Una vez pasado esa zona de monte nos plantamos en Aizkorri y recuperamos el trazado original de la Kosta. Bajando a la playa y dirigiéndonos hacia Larrabasterra. Desde Larrabas a Sope y luego por los caminos cercanos a los acantilados hasta Barrika. Por aquí nos encontramos con los de la martxa familiar que animan un montón, muy emocionante, parecemos hasta buenos. La verdad es que los andalaris, como siempre, de 10.

Pasado el ecuador de la carrera, pierdo a Jay que va a por las 3h:20’, yo no lo veo nada claro y prefiero ir más suave. Voy hasta Gorliz traquilo, aguantando, pero ya veo que me empiezan a faltar las fuerzas. Efectivamente, en cabo Billano, me desinflo como un globo, un bajonazo del copón. Voy penando hasta la carretera del faro donde me planteo la retirada. Sigo porque los andalaris me animan un montón.

En el faro vuelvo a pensarme la retirada pero coincido con Angel, Piter-Man y Alberto y voy con ellos hasta el Ermua. Eso sí, tengo clarísimo que a Arminza no bajo, cosa que no hizo falta porque desde el Ermua te mandaban directamente a meta. Vaya suerte, esto me anima bastante e intento mantener un trote mínimo.

En meta estaba Ana con las niñas, entro con ellas, Leire a toda pastilla e Irati me lleva de la mano. Al final 3h:31’, 12’ más que el año pasado, pero el recorrido era bastante más duro. Contento a pesar del ‘melokoton’ y pensando en las siguientes. En la zona de meta me hidrato un poco y como algo de fruta, saludo a los compañeros y nos vamos para Arrilane donde están Juanjo, Marijo, Maider y Piti esperándonos para comer.

Clásica comida de cervecera: pollo, ensalada, patatas… Luego, volvemos a la playa donde las niñas se lo pasan cañón y nosotros (Juanjo y yo) disfrutamos de un helado de queso de idiazabal con membrillo y nueces que está que te pasas, creo que éste va ser la canción del verano, je, je… Al final de todo se saca algo positivo y de esta carrera me quedo con el helado final, una joya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario