martes, 1 de enero de 2013

Urte Berri On.

Jo... vaya manera de acabar el año!! El 31 tuve que currar pero, con eso de la nochevieja, salimos un poco antes y decidí dar una vueltilla con la MTB para despedir el año. Hacía un buen día para andar suave por el Ganguren pues mira por donde que, bajando hacia Galdakao, meto la rueda en un agujero y me doy una piña del 7. Vuelta campana y con toda la cara en el suelo, un susto del copón. Me levanto, creo que no me he roto nada, pero tengo sangre en la cara. Nada, nada... termino la bajada andando porque el susto que llevo no me deja montarme otra vez en la bici. Llego a la pista, digamos la central que sube de Galdakao al Vivero, y ahí me montó y vuelvo a Lezama. Llego a casa muy dolorido, me miro en el espejo y, efectivamente, la cara hecha un cromo. Subo, me ducho y Ana me cura, no parece que tenga nada roto pero me ha quedado la cara hecha un poema.

En fin, parece que todo ha sido chapa y pintura y que podré pasar el resto de la noche con relativa normalidad. Tocaba cenar en Derio con mis padres, que no se han sorprendido tanto, vamos... que ya tienen asumido que estas cosas que me pasan no son tan raras. Aguanto el tipo durante la cena como buenamente puedo pero con unas ganas de meterme en la cama de la leche. Pero ya digo, ahí estoy con cava y todo después de las uvas. Eso sí, una copa de cava y nada más, no estaba para derroches después del megaporrazo.

He bajado por ese camino un porrón de veces y, siendo una bajada que hay que ir con cuidado, nunca había tenido problemas. En fin, está claro que nunca te puedes confiar. Por lo demás, hoy me he levantado a las 9 y no me encontraba mal del todo, se ha notado que ayer me tomé el resto del día muy tranquilo. Creo que para quitarme el mal sabor de boca del final del año, me he animado a subir trotando/andando al Ganguren, he ido muy tranquilo y he acabado contento. Bueno, a ver si me voy recuperando poco a poco, porque llevo una racha de golpes/lesiones bastante curioso.

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